La esperada jornada de ingreso de la ayuda humanitaria a Venezuela, programada para este sábado 23 de febrero, según el plan del presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, comenzó con la deserción de, al menos, cuatro militares venezolanos en el Puente Internacional Simón Bolívar.
Frente a autoridades de Migración Colombia ellos depusieron sus armas en el puente fronterizo por el que, se espera, circulen los camiones cargados de ayuda humanitaria para los venezolanos que aún permanecen dentro de territorio de su país, aún cuando el gobierno en disputa de Nicolás Maduro anunció el cierre total de los puentes fronterizos con Colombia hasta nuevo aviso.
De inmediato, el presidente encargado, Juan Guaidó, celebró la determinación de los uniformados a través de su cuenta de twitter, asegurando que "vamos bien Venezuela: Les confirmo que varios miembros de la Guardia Nacional asignados al puente Internacional Simón Bolívar han decidido sumarse a quienes estamos rescatando la democracia en Venezuela".
Posteriormente, Guaidó dijo el sábado a laVoz de Américaque "en Venezuela no hay justicia", pero que no importan los riesgos con tal de "hacer lo correcto por nuestra gente".