El gobernador de Florida, Ron DeSantis, activó a la Guardia Nacional de Florida y ordenó a las agencias de la ley estatales que ayuden en los Cayos a través de una orden ejecutiva en respuesta a la llegada de más de 700 migrantes ilegales. DeSantis dijo que Florida desplegará aviones, helicópteros y patrullas marinas en la zona para apoyar las interdicciones acuáticas y garantizar la seguridad de los migrantes que intentan llegar a Florida a través del Estrecho de Florida.
Más de 4.400 migrantes, en su mayoría cubanos y algunos haitianos, han llegado en barco a Florida desde agosto, mientras ambos países se enfrentan a crisis políticas y económicas cada vez más profundas y agravadas.
Dado que Washington y La Habana no mantienen relaciones diplomáticas, resulta problemático para el gobierno estadounidense devolver a los cubanos una vez que llegan a Florida. Los que son detenidos en el mar ya son devueltos, puesto que Cuba acepta a esas personas. Casi 8.000 cubanos y haitianos han sido interceptados desde agosto, alrededor de 50 por día en comparación con 17 por día en el año fiscal 2021-22 y solo dos por día durante el año fiscal 2020-21.
Las autoridades dijeron que al menos 65 migrantes han muerto en el mar desde agosto.